Rutina de cuidado facial día y noche

¿Sabes cómo elaborar tu rutina de cuidado facial de día y de noche? En este post te contamos los detalles para cuidar tu piel por el día y por la noche.

Elena

29-11-2017

¿Cuántas veces te has quedado mirando tu tarro de crema para tratar de adivinar si es para el día o para la noche? Y, ¿cuántas te has preguntado cuándo aplicarte el sérum, el contorno, el tónico… y los mil productos que llenan la balda de tu baño? ¿Cuál es el orden correcto para aplicarte tus cremas?

¡No estás sola! Esa situación la vivimos todas las mujeres a diario, por eso, te vamos a contar cómo debe ser una rutina de cuidado facial de día y noche, para que tengas claro cuándo aplicar cada producto y ¡luzcas una piel fabulosa!.

Los tratamientos cosméticos se desarrollan teniendo en cuenta la cronobiología de la piel, diferenciando entre cremas de día, orientadas a aumentar la protección de la piel y fortificar la función barrera, y de noche, enfocadas en regenerar y reparar la piel mientras duermes.

En el caso de las cremas de noche muchas de ellas incorporan elementos microexfoliantes como el ácido salicílico o glicólico que alisan la superficie de la piel, o incluso detoxificantes para proporcionar una piel visiblemente descansada y recuperada.

Cuidado facial: ¿cómo debe ser una rutina de limpieza facial?

Una rutina de cuidado facial de día y noche efectiva es fundamental para mantener la salud y la apariencia de la piel. Se compone de varios pasos que abordan diferentes aspectos, desde la limpieza hasta la hidratación y la protección solar. Aquí te damos unas pautas sencillas sobre lo que debe incluir tu rutina de cuidado facial de día y de noche.

1. Limpieza facial:

Comienza la rutina con una limpieza facial suave para eliminar el maquillaje, el exceso de grasa y las impurezas acumuladas durante el día. Utiliza un limpiador adecuado para tu tipo de piel, ya sea seca, mixta, grasa o sensible.

2. Exfoliación de la piel:

La exfoliación elimina las células muertas de la piel, revelando una tez más radiante. Realiza este paso de una a tres veces por semana, dependiendo de tu tipo de piel. Evita exfoliantes abrasivos y opta por opciones más suaves con ácidos exfoliantes o partículas finas.

3. Tonificación:

El tónico equilibra el pH de la piel y la prepara para la absorción de los productos posteriores. Escoge una fórmula sin alcohol que contenga ingredientes calmantes, como aloe vera o camomila.

4. Sérum:

Los sérums son concentrados de ingredientes activos diseñados para abordar problemas específicos, como arrugas, manchas o falta de luminosidad. Aplica un sérum después del tónico para obtener beneficios relacionados con las necesidades de tu piel y mejorar su textura. Puedes incorporar los sérums en la rutina de cuidado facial de día y de noche.

5. Hidratación de la piel:

La hidratación es esencial para mantener la piel suave y flexible. Usa una crema de día hidratante adaptada a tu tipo de piel en la rutina de día y una de noche por la noche. Las pieles grasas encontrarán más cómodas las fórmulas ligeras, mientras que las pieles secas pueden necesitar cremas más densas. Una buena crema hidratante es esencial en toda rutina de cuidado facial de día y de noche.

6. Protección solar para la rutina de día

La protección solar es clave para prevenir el envejecimiento prematuro y proteger la piel de los daños causados por los rayos UV. Aplica un protector solar con un SPF de al menos 30 cada mañana, incluso en días nublados.

Es súper importante, que incorpores en tu rutina facial de día protectores solares con filtro UVA / UVB como un paso más en la rutina, para que te protejan de los rayos solares que fomentan el fotoenvejecimiento de la piel. Un ejemplo magnífico es la Loción hidratante de Rostro SPF50 de Cerave que además de hidratar la piel y reponer la barrera de la piel protege de la radiación solar para mantener tu rostro en perfectas condiciones todo el día.

Y si además de proteger la piel del sol quieres corregir manchas e iluminar tu rostro Advanced Brightening UV Defense Sunscreen SPF50 será tu mejor aliado. Gracias a su fórmula con ingredientes correctores de la hiperpigmentación, verás tus manchas difuminadas al tiempo que proteges tu piel de los rayos UVA / UVB.

Si también te preocupan los efectos de los agentes externos como la contaminación, el estrés, el clima… Un producto todoterreno para el día del que no te podrás separar es Minéral 89, un poderoso sérum que hidrata, ilumina y rellena la piel para que luzca jugosa cada día.

Rutina facial de noche

Durante la noche se ponen en marcha procesos de reparación, renovación, exfoliación e incluso un aumento de la secreción sebácea de la piel. Cuando dormimos tienen lugar todos esos procesos y cuando el descanso es insuficiente o se produce de forma irregular, puede repercutir en el aspecto de nuestra piel durante el día, teniendo un aspecto cansado o fatigado.

En la rutina de noche, tras la limpieza facial, lo mejor es usar tratamientos regeneradores y reparadores, fórmulas ligeramente más ricas para aportar la nutrición necesaria a la piel.

Un ejemplo si tu piel necesita un extra de hidratación, corregir los signos de fatiga y líneas de expresión mientras duermes, tu tratamiento ideal es Liftactiv H.A. Crema Antiarrugas Reafirmante - Noche.

Pero siempre siguiendo un orden: después de la limpieza y tonificación de la piel, aplicamos el sérum, después la crema de día y por último el contorno.

Ahora ya sabes cómo debe ser tu rutina de cuidado facial de día y noche ¿A qué esperas para poner en práctica estos consejos?