Piel de naranja: qué hacer y qué no para combatirla

La piel de naranja afecta al 90% de la población femenina aproximadamente. Terminar con ella es complicado, pero puedes mejorar el aspecto de tu piel siguiendo algunas recomendaciones. Sigue leyendo para descubrirlas.

Carlos

27-09-2019

¿Qué es la piel de naranja?

La archiconocida piel de naranja es el efecto producido por el tejido graso subcutáneo que se acumula hasta sobresalir por la epidermis, conformando una especie de red con pequeños bultitos que recuerda a la textura de la piel de naranja.

Esta acumulación de tejido adiposo en forma de nódulos u hoyuelos aparece sobre todo en caderas, nalgas, muslos y abdomen.

¿Por qué tengo piel de naranja?

Son varios los factores que intervienen en la formación de la piel de naranja, pero podemos identificar tres como los más influyentes:

1.     Género. Es más frecuente en mujeres que en hombres debido a la distribución corporal de la grasa y a su tejido conjuntivo.

2.     Edad. Comienza a conformarse al superar la adolescencia, cuando el metabolismo se ralentiza.

3.     Genética. Si los miembros de tu familia han tenido piel de naranja, es probable que tú también la desarrolles.

Cómo eliminar la piel de naranja

La celulitis está muy extendida entre la población y no compromete nuestra salud. Sin embargo, puede convertirse en una preocupación por cuestiones estéticas. Si es tu caso, sigue estas recomendaciones sobre cómo quitar la piel de naranja:

¿Qué debes hacer?

-         Dieta saludable y equilibrada. Incrementa el consumo de frutas y verduras, ya que favorecen la circulación y contribuyen a mejorar el aspecto de la piel.

-         Hidratación. Beber mucha agua siempre es importante cuando se trata de la piel. También puedes optar por infusiones y zumos naturales.

-         Ejercicio. El deporte es imprescindible: los ejercicios anaeróbicos y los específicos para las zonas afectadas te ayudarán en tu lucha contra la piel de naranja. Además, activarte en el día a día también ayuda: subir las escaleras, ir andando al trabajo y los recados, salir a caminar, etc.

-         Cremas para la piel de naranja. Los tratamientos cosméticos contribuyen a mejorar el aspecto de la piel y disimular el efecto de piel de naranja. Los más efectivos son los que contienen sustancias con efecto lipolítico (es decir, que disuelven grasas), sustancias que actúan sobre el tejido conjuntivo y activadores de la microcirculación.

-         Masajes para estimular la circulación. Realízate masajes para favorecer la absorción de las cremas y para facilitar la circulación.

¿Qué debes evitar?

-         Malos hábitos alimenticios. Los alimentos grasos, el exceso de sal en las comidas, los productos procesados y los azúcares refinados contribuyen a la retención de líquidos y acumulación de toxinas.

-         Sedentarismo. El sedentarismo hace que el metabolismo se ralentice, dando lugar a una mala circulación, insuficiencia linfática y acumulación de toxinas, empeorando el aspecto de nuestra piel.

-         Tabaco y alcohol. Las toxinas del tabaco y el alcohol influyen en la salud de nuestra piel, también en la formación de la piel de naranja.

Por último, recuerda que la piel de naranja es solo una cuestión estética. Mantén una vida saludable y no te obsesiones por los dilemas físicos, ¡quiérete!